Se conserva una fotografía de R. M. Anderson, la fotógrafa norteamericana que plasmó la realidad de la Galicia de los años veinte, donde se aprecian unas obras en el Campillo o Campiño pontevedrés de Santa María.
No sabemos si por aquel tiempo, cuando se usaban los carros de bueyes en las obras públicas, tal como muestra la instantánea, los trabajos se prolongarían a lo largo de numerosos meses con períodos de inactividad, como sucede en la actualidad, creando ese aspecto de escombrera.
Por lo menos, en el Campillo de los años veinte, espacio que no es otra cosa que la planicie que se extendía por encima de la línea de la barbacana de la muralla, se puede observar que contaban con la fila de árboles como algo propio de aquel lugar.
En nuestro tiempo talaron los que había y nadie sabe si se repondrán de nuevo en aquel sitio.
No sabemos si por aquel tiempo, cuando se usaban los carros de bueyes en las obras públicas, tal como muestra la instantánea, los trabajos se prolongarían a lo largo de numerosos meses con períodos de inactividad, como sucede en la actualidad, creando ese aspecto de escombrera.
Por lo menos, en el Campillo de los años veinte, espacio que no es otra cosa que la planicie que se extendía por encima de la línea de la barbacana de la muralla, se puede observar que contaban con la fila de árboles como algo propio de aquel lugar.
En nuestro tiempo talaron los que había y nadie sabe si se repondrán de nuevo en aquel sitio.
Ó mellor están a buscaren que o resultado final das obras resulte un calco do que se ve na fotografía de R. M. Anderson.
ResponderEliminartanta prisa corría en movernos a los jóvenes para no molestar a los vecinos, y ahora las obras llevan paradas meses...es alucinante la comparación de las dos fotos la verdad, muy buena
ResponderEliminarOye, pues a los camaradas del Partido, creo que les gustaría mucho la idea de eliminar por completo los vehículos de tracción mecánica, tan contaminantes ellos y regresar a una Galiza idílica, donde el transporte estuviera a cargo de los carros de bueyes, como el de la foto de Anderson.
ResponderEliminarPor lo menos, en esa línea de consenso trabajan día a día con sus actos de gobierno !!!!
La versión actual sería igualita en todo a la de los años 20, pero aguzando la vista, la diferencia serían las pegatinas de los bueyes: unos logos de "Concello De Pontevedra", y los señores serían funcionarios del servicio de limpieza, retirando los restos del botellón un domingo por la mañana temprano.
ResponderEliminar(Año 2012, por la carestía del combustible y la quiebra de las instituciones municipales, el Servicio de Basuras sustituye los camiones y la tracción mecánica por tracción animal, con la excusa de ser "menos contaminante". La bosta de vaca o buey se recicla como abono para los jardinillos municipales, y el concejal de medio ambiente, se jacta de haber "eliminado la contaminación acústica" de los camiones...)
GALIZA 2012