No cabe duda de que uno de los entornos urbanos donde está más limitada la movilidad, tanto rodada como peatonal, es el de la Plaza de España.
El bloqueo de esa zona se debe al vallado allí instalado motivado por las obras del parking subterráneo que ahí se realiza. Evidentemente que las molestias eran esperadas, pero debido a la afección de nada menos que diez céntricas calles ¿No se podrían doblar los turnos de trabajo? Oiga, es que ni siquiera se trabaja allí los sábados.
En fin, un estrecho pasillo da servicio a las turísticas ruinas de Santo Domingo e Instituto Valle Inclán. Sólo en los cincuenta metros de la calle Riestra más próximos a la valla hay media docena de bajos desocupados, buena muestra de los daños colaterales de la peatonalización y la gestión de las obras.
La calle Herreros o Ferreiros, al igual que la de Arzobispo Malvar gozan de mayor talante al estar bloquedas tanto por detrás como por delante.
La calzada de la pequeña rúa del Maestre Mateo, que comunica la plaza de España con la Avenida de Santa María será reducida debido a que se compartirá con la entrada al futuro Museo de las Torres Arzobispales.
¿Saben como acceden los vecinos a sus casas de Santa María? Pues por San Bartolomé la única vía de entrada.
Si a todo esto unimos el cierre de la Alameda, la citada escalera de los Churruchaos y ahora las obras de las calles de Don Filiberto y Charino, a ver quien es el listo que se mueve.
El bloqueo de esa zona se debe al vallado allí instalado motivado por las obras del parking subterráneo que ahí se realiza. Evidentemente que las molestias eran esperadas, pero debido a la afección de nada menos que diez céntricas calles ¿No se podrían doblar los turnos de trabajo? Oiga, es que ni siquiera se trabaja allí los sábados.
En fin, un estrecho pasillo da servicio a las turísticas ruinas de Santo Domingo e Instituto Valle Inclán. Sólo en los cincuenta metros de la calle Riestra más próximos a la valla hay media docena de bajos desocupados, buena muestra de los daños colaterales de la peatonalización y la gestión de las obras.
La calle Herreros o Ferreiros, al igual que la de Arzobispo Malvar gozan de mayor talante al estar bloquedas tanto por detrás como por delante.
La calzada de la pequeña rúa del Maestre Mateo, que comunica la plaza de España con la Avenida de Santa María será reducida debido a que se compartirá con la entrada al futuro Museo de las Torres Arzobispales.
¿Saben como acceden los vecinos a sus casas de Santa María? Pues por San Bartolomé la única vía de entrada.
Si a todo esto unimos el cierre de la Alameda, la citada escalera de los Churruchaos y ahora las obras de las calles de Don Filiberto y Charino, a ver quien es el listo que se mueve.
Sinalas ben cando contabilíza-los novos cerres de negocios en Riestra, novas víctimas da pandemia de ruínas que trouxo consigo a peatonalización.
ResponderEliminarPropuxéronse que cada día morrera a cidade un pouco máis e a fe que o van conseguir. Inventarán novas asociaciós se preciso fose pra branquexa-las novas bravuras que se lles poida ocurrir.
Esto do Día da Accesibilidade é unha máis das súas caralladas, na línea das Peregrinas e da Feira Franca.
Cada día, co papanatismo dos nosos mandiños, son máis frecuentes as bicicletas suicidas. Vése que son aldeáns, que carecen de cultura urbáa. Vamos, que non están preparados nada máis que pra inducir algún que outro pelotazo.
Haberá ocasión de volver.
Ah, esquecíame. Tamén van obrar na Rúa Cega, San Sebastián.
Informaron ós veciños o 21.07, pero non acodín á xuntanza. TEríalles proposto que aproveitasen a pedra vella, porpiaño, pasándoa pola serra e recolocándoa axeitadamente. Aforrarían cartos.
Parece van segui-lo criterio de San Román e Manuel Quiroga, que quedaron ben enlousadas e levan tapas de fundición, non son as tapas trampa que privan en todo canto fixeron na zona vella, obra mal feita, gran estafa.