Transporte de ría. Y yo más.

Esto no hay quien lo entienda. Después de pasar Pontevedra medio siglo sin un transporte marítimo que acercara la capital a otras localidades de la ría, en estos últimos meses hemos asistido a una alocada carrera de las diferentes administraciones públicas por implantar ese servicio.
Como muchos recordarán, el pasado septiembre, la entidad Portos de Galicia, dependiente de la Xunta, presentó el catamarán "Acuarium cat", el barco que una empresa concesionaria usará para unir el muelle de As Corbaceiras con los pantalanes de Aguete, en Marín.
En su momento se expusieron las características técnicas del navío, apto para transportar sobre unos 150 pasajeros, así como se recordó las ventajas de este nuevo sistema de transporte "natural, ecolóxico, económico e rápido" frente a las líneas terrestres habituales.
Ahora, sin comenzar todavía a funcionar este servicio, que en principio se reserva para los meses de buen tiempo, se acaba de presentar, a instancias de la entidad turística Terras de Pontevedra otro servicio de transporte marítimo, pero en este caso las embarcaciones "semirígidas" son de menor eslora, calado y muchísimo más rápidas y vulnerables. Mientras los conductores terrestres apuraban su paciencia en los tramos de las avenidas de Beiramar y Marín, las veloces lanchas capitaneadas por los alcaldes del bloque inauguraban el pasado viernes lo que se pretende sea un servicio de taxi rápido a playas y otros localidades costeras, incluidas las islas.
En fin, que siguen las diferentes Administraciones Públicas, para el caso de Pontevedra, siendo incapaces de presentar un proyecto común y homogéneo que de respuesta al problema del transporte marítimo de pasajeros.
Por cierto que la velocidad máxima de las semirígidas se estima también en treinta. Pero son nudos, que equivalen a unos sesenta kilómetros por hora. Acabarán también multándolas, o poniendo "lombos de mar".
(foto, La Voz de Galicia)