Parece mentira que una ciudad tan bonita como Pontevedra haya renunciado a tener una estación modernizada para recibir al llamado tren de alta velocidad, si algún día se decide a parar en esta capital.
Habría que recordar que la demanda del ferrocarril para esta población, generó un considerable esfuerzo de nuestros antepasados más dinámicos del siglo XIX, debates políticos, periódicos, manifestaciones... hasta que un día consiguieron el camino de hierro entre Carril primero, y después unirnos con Redondela y el resto de España.
Si ahora aquellos valientes levantaran la cabeza y vieran la indolencia de nuestros gobernantes sobre este asunto se volverían a morir.
Por aquí todo lo más que se hizo fue una reunión entre Louzán y Mosquera para sobrevolar los salones del Lérez con un puente ferroviario, que bien pudo ser mixto, para acoger el tráfico rodado y no tener que construir otro a mayores, privándonos así de un espacio que en otras latitudes se hubiera ya declarado como Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Y ahora, para rematar este post, que hace ciento veinte años hubiera tenido un gran interés para los pontevedreses, un pequeño detalle, apenas sin relevancia, para paseantes, y demás amigos de jardines, farolas y lombos. Se trata de las inversiones previstas (en millones de euros) en otras ciudades gallegas para modernizar las estaciones ferroviarias y adaptarlas a la llegada, o pasada en su caso, del AVE.
Habría que recordar que la demanda del ferrocarril para esta población, generó un considerable esfuerzo de nuestros antepasados más dinámicos del siglo XIX, debates políticos, periódicos, manifestaciones... hasta que un día consiguieron el camino de hierro entre Carril primero, y después unirnos con Redondela y el resto de España.
Si ahora aquellos valientes levantaran la cabeza y vieran la indolencia de nuestros gobernantes sobre este asunto se volverían a morir.
Por aquí todo lo más que se hizo fue una reunión entre Louzán y Mosquera para sobrevolar los salones del Lérez con un puente ferroviario, que bien pudo ser mixto, para acoger el tráfico rodado y no tener que construir otro a mayores, privándonos así de un espacio que en otras latitudes se hubiera ya declarado como Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Y ahora, para rematar este post, que hace ciento veinte años hubiera tenido un gran interés para los pontevedreses, un pequeño detalle, apenas sin relevancia, para paseantes, y demás amigos de jardines, farolas y lombos. Se trata de las inversiones previstas (en millones de euros) en otras ciudades gallegas para modernizar las estaciones ferroviarias y adaptarlas a la llegada, o pasada en su caso, del AVE.
Vigo 200
Coruña 182
Ourense 67,5
Santiago 35
Redondela 7,3
Pontevedra 2,5
Coruña 182
Ourense 67,5
Santiago 35
Redondela 7,3
Pontevedra 2,5
Hasta Redondela nos gana con un 300% más de inversión.
ResponderEliminarPero no pasa nada. Redondela no está tan bonita como Pontevedra.
Grande D.Fili grandísimo!!!
ResponderEliminarDEMOLEDOR
ResponderEliminarY TAN TRISTE
MEXAN POR RIBA DE NOS E DICIMOS QUE CHOVE.
Cuanta deazón y desesperanz provoca decir que soy de Pontevedra. Y ala vez, la esperanza es patente sabiendo que hay gente como vosotros.
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