Un rosario de averías en la red de abastecimiento de agua a Marín, algunas reparaciones suman ya los 300.000 euros, pone en entredicho la política municipal de esta última década.Porque no olvidemos que los ayuntamientos de la ría, desde Sanxenxo y Poio hasta Marin y Bueu se surten de las aguas del río Lérez, captadas en el municipio de Pontevedra.Y aun siendo el abastecimiento un servicio básico y esencial, que debía funcionar sin grandes sobresaltos, garantizando el consumo a usuarios y particulares, ya no digamos al sector turístico y al industrial, perdimos más de diez años en pleitear entre ayuntamientos y parchear el servicio.La falta de liderazgo político de Pontevedra impidió que en esta década prodigiosa en otras inversiones se zanjara de una vez por todas el necesario problema del agua. No fueron capaces de sacar ni una mancomunidad ni un consorcio adelante. Eso si, en estudios de áreas territoriales, planes de comarcalización y otros experimentos entre concellos afines en ideologías se perdió todo un pastón.
Ahora parece que tiene que ser el Estado, el de toda la vida, a través de sociedad publica Acuanorte, el que tras muchos años de desencuentros tenga que diseñar un plan con su correspondientes inversiones para que nos hagamos civilizados en el manejo del líquido elemento y abandonemos por fin el tercer mundo.
Y si ya es lamentable lo del abastecimiento, peor está lo de la depuración de las aguas.A ver sino como se explica que la parroquia pontevedresa de Lourizán tenga que soportar una estación depuradora EDAR, donde se tratan ya no sólo las residuales de Pontevedra, sino que retornan las de Marin y aun se bombean las de Poio, en la orilla de enfrente.También en este caso falla la política medioambiental y la tan cacareada “solidaridad” entre Concellos.
Creo que esta semana la Xunta aprobó una nueva depuradora para la isla de Ons. Aquí seguimos esperando hasta el día del vertido final.
Lores para reunir a los alcaldes del area sanitaria norte si que anduvo fino, ahora para arreglar el problema del agua a los de la ria ni está ni se le espera
ResponderEliminarEsto si que es un ejemplo práctico de la "Grandeza" de esta democracia. Semejante incompetencia y estupidez administrativa deberá enseñarse en las escuelas, en un futuro próximo, para que no se repita la historia.
ResponderEliminarLos pueblos que desconocen su historia, están condenados a repetirla.
MIllones en sueldos, millones en comisiones, millones en asesores maricones, mil millones... y no son capaces de crear una estructura de aguas con un mínimo de sentido común y cooperación.
Son incapaces de crear nada con sentido común. Todo es náusea,asco y delirio de Partido.
Lo que yo no sabía es que la aberración llega al extremo de que se bombean aguas fecales de Poio hasta la EDAR de Lourizán
¿Pero qué cojones es eso de "bombear" aguas residuales de un sitio para otro???
¿Es que aquí se ha vuelto loco todo el mundo o que carallo pasa?? ¿Y que será lo próximo? ¿Bombear las aguas fecales del Morrazo hasta Cartagena? ¿Cartagena de Indias?
¿Qué cojones está pasando en este país en mano de dementes, psicópatas y aldeanos???
Todos estos años de cambios de bancos, papeleras, farolas, pavimentos, levanta o Campiño, vóltao ao poñer, humaniza por aquí, por allá, y el problema de como tratar las aguas residuales, o garantizar que la peña pueda beber en verano, eso sin resolver.
ResponderEliminarJoder que tropa.
Pero en cambio si crearon la Mancomunidad de Terras de Pontevedra, para así duplicar o triplicar gastos que generan otros organismos como el Patronato de turismo Rias Baixas e incluso la Xunta de Galicia con sus entes destinados a promocionar el turismo.
ResponderEliminar¿No os parece que para titiriteiros, comilonas y otras sandeces tienen dinero?, pero para potenciar el comercio de esta ciudad, que era muy importante, para ahí, si que no sólo, no se potencia sino que incluso se le ahoga impidiendo acceder con vehículos de particulares a los distintos negocios de esta vella ciudad.
Falta una apuesta clara de apoyo hacia los industriales, por cuanto todo lo contrario se les persigue
y ahora el agua a Marin se la da celulosas, nadie la quiere pero nos da hasta el agua.
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